Les comparto este artículo que muy gentilmente el amigo y colega Carlos Martínez de www.todosports.com me envió...disfrútenlo!
Este martes 2 de octubre de 2012, salió a la luz la presentación de la
mascota que a partir de la fecha tendrá la Federación Panameña de
Fútbol en el proceso no solo de las eliminatorias para el Mundial de
Brasil 2012 en su selección masculina mayor, sino también para las
diferentes actividades del fútbol panameño tanto en el medio local
como internacional.
"Garra", un águila harpía que muestra una vez más la toma de
conciencia de colocar a nuestra ave nacional, hoy una especie
protegida como símbolo de nuestra identidad futbolística, nace para
formar parte de la fuerza que necesita la 'Marea Roja' para acompañar
a la selección panameña a la meta ansiada y no solo eso, sino que
busca crear conciencia sobre esta especie que forma parte de nuestra
fauna ambiental, que forma parte de nuestro escudo nacional luego de
muchas reformas que se han dado en esta materia y muy pronto será
parte del logo que identifica a la Federación Panameña de Fútbol a
partir del año 2013.
Sin embargo, "Garra" no es la primera ni la única mascota que ha
tenido la selección panameña de fútbol a lo largo de nuestra historia
futbolística.
Hasta antes de este personaje, otro ya olvidado prácticamente pero que
renace como un antecedente de la simpática ave futbolera se menciona
como la hasta entonces única mascota oficial que tuvo la Fepafut y la
selección nacional, y se dio en 1980.
Surgido prácticamente producto de la casualidad como una caricatura
crítica aparecido en la sección de deportes del ya desaparecido diario
"La República", en 1980, un personaje que simbolizaba a nuestro
campesino panameño con su sombrerito pinta'o y que forma la
representación del pueblo, del panameño común de la calle de entonces
pedía a gritos apoyo para que se le patrocinara a la selección
canalera en su camino al Mundial de Fútbol de España 1982.
De ese entonces, surgió la figura de nuestra primera mascota,
"Montunito", y su creador fue en ese tiempo un muchacho de apenas 12
años quien sería hijo del caricaturista de aquel rotativo, periodista
y publicista, actualmente jubilado, Carlos "Chic" Martínez (mi papá),
creador de un personaje popular de caricaturas de humor político
llamado "Petrolón", y hermano de quien es actualmente periodista
deportivo especializado en el deporte fútbol, Carlos Martínez Vega,
llamado Juan Carlos Martínez (mi hermano).
"Montunito" fue el abanderado de aquella selección y de una entidad
federativa que a diferencia del actual "Garra", no contaba con apoyo
del gobierno y de la empresa privada, no había el marketing que existe
en los últimos años y en el que el fútbol tenía que seguir luchando a
brazo partido frente a la popularidad de otros deportes donde los
medios le prestaban mayor atención entonces como el béisbol, el boxeo
y el baloncesto que estaba en su mejor momento deportivo.
Por su motivación, por la edad que tenía con ese talento y el deseo de
llevar con este personaje la ilusión de que una selección nacional
pese a todos los inconvenientes podía llegar hasta la fase final
mundialista, la Federación Panameña de Fútbol, entonces presidido por
el ya desaparecido Carlos Alberto "Pepe" Vásquez, le hizo entrega de
un reconocimiento con el que la Fepafut adoptó a "Montunito" como su
mascota oficial, el 2 de julio de 1980, en horas de la noche en el
antiguo Estadio Revolución (hoy Estadio Rommel Fernández) antes del
partido de eliminatorias entre Panamá y Guatemala.
"Montunito" estuvo incluso hasta vestido en harapos cuando la
selección estaba luchando contra todo al ya darse por eliminada de
toda opción, pero lamentablemente el personaje se llegaría a perder
casi en el olvido, lastimosamente junto con las luchas intestinas que
se dieron por el poder dentro del solio federativo que se dio entonces.
El personaje nuevamente salió a la palestra como parte de las
caricaturas de las columnas "A Todo Fútbol" y "Balonazos" que escribía
mi persona (Carlos Martínez Vega) en las publicaciones "Todo en
Deportes" (ya desaparecido) y en el diario "La Estrella de Panamá",
entre 1987 y 1991, cuando ya de ahi el "Montunito" dio su adiós
definitivo.
Actualmente, mi hermano Juan Carlos Martínez, es ingeniero civil, y
realiza su vida de forma normal en sus actividades privadas con su
esposa, Mari Carmen Tejeira y sus dos hijos, Juan Carlos Jr, de su
primer matrimonio con Gamil Singh Tijerino (de 7 años de edad), y
Valeria del Carmen (que cumplirá 2 años el 19 de diciembre próximo).
Después de "Montunito" surgieron ya mascotas no oficiales para la
selección panameña.
En 1992, en el proceso al Mundial de USA 1994 frente a Costa Rica, la
promoción que hizo el diario La Prensa llamado "¿Dónde está Javier?",
basado en la historia del juego de busqueda de una persona entre
tantas personas en un solo lugar de origen británico llamado "Where's
Waldo?", hizo que el propio personaje de "Javier" se convirtiera en
una especie de "mascota" que lastimosamente se volvió un arquetipo o
una antitesis de los valores que tuvo "Montunito", es decir, se le
veía con el uniforme de la selección de fútbol de entonces pero con
lentes oscuros, con un 'walkman' escuchando música y con una lata de
cerveza en una de sus manos, lo que hacia ver al personaje no como
futbolista sino como parte de la cultura del grubeo que aún hoy existe
lastimosamente.
Para 1996, y al no haber mascotas que puedan motivar a la selección,
mi persona (Carlos Martínez Vega) decidí crear de entre una de mis
personajes que son niños y niñas basado en mis propias experiencias y
amistades personales, a una niña robot como un homenaje al personaje
de "Astroboy" de Ozamu Tezuka, aunque la habia creado muchos años
antes como un hobby para entretenerme en los ratos libres.
"Myrna Roboquito" surge para motivar a la afición a que fuera en masa
el domingo 9 de junio de 1996 al viejo Estadio Rommel Fernández para
respaldar a la selección mayor que estaba a punto de pasar por primera
ocasión en la historia de las eliminatorias mundialistas a una segunda
ronda en la zona de Concacaf frente a Belice, luego que ocho días
antes había ganado a los caribeños en Belize City.
La fórmula me dio resultado y pudimos aportar a esa iniciativa, pero
fue una mascota no oficial y era la imagen de una niña, lo que hubiera
podido acomodarse al fútbol femenino, como lo haríamos con tres
muñecas que se convertirían en las mascotas oficiales del Torneo
Premundial Uncaf Sub19 en el año 2002 en el que tres niñas: "Gianina",
"Wendy" y "Rosmery", una goleadora, una defensa y una portera,
alegrarían un breve certamen en el que Panamá conseguía por primera
vez con su primera selección nacional femenina la satisfacción de
llegar a las finales de la categoría de Concacaf peleando los cupos al
primer Mundial Sub20 en Canadá.
Después de estos dos años, no hubo mascotas tanto oficiales como
muchos no oficiales, aunque para el Mundial 2002, en su eliminatoria
dos años antes, uno de los primeros grupos organizados que con el paso
de los años se convertiría en la agrupación "La Extrema Roja" crearon
un personaje que simbolizaba a un gallo de pelea pero no tuvo mucha
aceptación y solo estuvo presente en dos partidos, frente a México y
frente a Canadá, ambos, en la capital panameña.
Luego, figuras reales como el funcionario de Fepafut, Francisco
Castillo, se adoptó un personaje que también fue mascota aunque nunca
llegó a ser aprobado oficialmente como tal pero lo aceptaban como una
iniciativa. "El Balón Asesino" se llamaba y era un tanto grotesco pero
que era amistoso con los nuestros y todo un asesino futbolístico con
los rivales.
Antes de "Garra" hubieron otros personajes recientes como el de la
página de Facebook, "Soy Panameño" en el que lo más cercano al
"Montunito" pero casi al estilo de las personajes de las "Powerpuff
Girls" invitaba al reto para perder el miedo en el que el futbolista
panameño debe tener frente a los grandes del fútbol.
"Garra" tiene sus parientes, los mencionados anteriormente ya lo
fueron, ya hicieron su historia, ahora llega el turno de que la
simpática Aguila Harpía gana su historia, levante su vuelo y que el
mismo sea de triunfos.